Es
posible que si usted no es un aficionado adicto al cine, se le haga
extraño el nombre de Allan Dwan, uno de los grandes pioneros de la
filmografía norteamericana y uno de los maestro del Cine
Clásico.
Dwan nació en Canadá en 1.885. Y no llega a Estados Unidos hasta
los 11 años con su familia. Se desconoce algún interés por la
incipiente industria fílmica a su temprana edad, lo que le lleva a
graduarse de ingeniero electrotécnico y empezar su vida laboral en
esta profesión. Si saber para ese entonces, que se convertiría en
uno de los directores pioneros del Cine
Clásico.
CINE
CLÁSICO: UN TALENTO CANADIENSE
Allan
tuvo su primer contacto con el mundo del cine contratado por Essanay
para crear lámparas para rodar. Desde ese momento comienza su ardua
y prolífica carrera en el celuloide hasta 1961 cuando se retira,
muriendo 20 años después en 1981. Su primer éxito fue, de la mano
de Douglas Fairbanks, en “Robín
Hood” de 1922. De allí sigue lo éxitos por cuenta propia con las
películas del Cine
Clásico
sonoro: “Suez”
en 1938 y “Iwo
Jima”
en 1.949 con el mítico Jhon Wayne. En su haber tiene decenas de
obras cinematográficas, incluyendo cientos de cortometrajes
realizados entre 1909 y 1913. Dentro de su extensa filmografía se
puede destacar: “Quien
roba a un ladrón”,
“Zaza”,
“Como un hermano”,
“Juguete
del placer“,
“Su
primer amor”,
“ La
favorita de la legión”,
“Nueva
York de noche“,
“La
esclava del pasado“,
“ De
la cocina al escenario”
y muchas otra obras del Cine
Clásico.
CINE
CLÁSICO. LOS APORTE Y DESCUBRIMIENTOS DE DWAN
Uno
de los grandes aportes que hace este ingeniero llegado al mundo del
cine fue los inicios del “El Travelling”, técnica de la
movilización de una cámara por un escenario natural. Entre los
descubrimientos de talentos, que se le asignan a él están Lon
Chaney, Ida Lupino y Rita Cansino, la futura Rita Hayworth. En sus
inicios también fue guionista, pero probablemente, lo que lo ha
llevado a ser uno de los grandes del Cine
Clásico,
es haberse adaptado a todos los grandes avances tecnológicos. Ya que
con sus obras se paseó desde el Cine
Clásico
mudo, pasando por el Cine
Clásico
sonoro y el cine a color. Y en todas estas etapas mantuvo su gran
calidad, inspiración y una excepcional elegancia cinematográfica
que lo caracterizaba. Este es el momento que descubras a este maestro
del Cine
Clásico
viendo sus grandes obras fílmicas.
Disfrute de algunas de sus películas: Click aquí
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